Mencionamos con anterioridad el impacto directo a la persona o usuario del elevador y cómo, directa o indirectamente, esto puede afectar la imagen de nuestra empresa e influir en la proyección de Servicio al Cliente que estamos brindando.La parte final que debemos tener presente se refiere a los costos indirectos en los que podemos incurrir cuando vamos un poco más allá del daño inicial (incidente) al usuario.
Enfoquemos dos aspectos donde: en un primer caso la situación se resuelve a “corto plazo” y; la segunda, donde la situación se extiende a largo plazo y con consecuencias legales.
1.- Daños a la propiedad o personas
Están directamente relacionados a las paradas por accidentes (mal funcionamiento del equipo). La gravedad del caso depende del problema del equipo en sí mismo. Los casos que envuelven personas son más críticos, pues pueden terminar en demandas judiciales.
Cuando hay daños a la propiedad puede ser reflejo (causa) de un problema serio de mantenimiento. No se ha dado el mantenimiento adecuado, no se ha hecho el mantenimiento preventivo necesario o, la compañía que está dando el servicio no es competente.
2.- Demandas
Las demandas, aun cuando pueden envolver a la empresa que ofrece el servicio de mantenimiento relacionan directamente al dueño del elevador; sea empresa o individuo. Al hablar de demandas se habla (además de la falta de mantenimiento) de la “negligencia del propietario" en mantener el equipo operando adecuadamente.
Si la empresa de mantenimiento puede demostrar que ha cumplido con lo estipulado en el contrato y que ha hecho las recomendaciones y sugerencias debidas de cambio y reemplazo de partes, sin repuesta del dueño, es seguro que la responsabilidad final recaerá en este último.
Para evitar estas situaciones consulta con una empresa acreditada en mantenimiento de elevadores y pídeles una evaluación del estado actual de tu equipo.
Muchas veces podemos iniciar un plan de trabajo hacia un mantenimiento preventivo con una inversión inicial mínima que prevé tener que llegar a alguno de los casos mencionados.
Crear un presupuesto para reemplazo de partes de emergencias junto con un Programa Preventivo de Mantenimiento es la clave del funcionamiento correcto de tu elevador!
1.- Daños a la propiedad o personas
Están directamente relacionados a las paradas por accidentes (mal funcionamiento del equipo). La gravedad del caso depende del problema del equipo en sí mismo. Los casos que envuelven personas son más críticos, pues pueden terminar en demandas judiciales.
Cuando hay daños a la propiedad puede ser reflejo (causa) de un problema serio de mantenimiento. No se ha dado el mantenimiento adecuado, no se ha hecho el mantenimiento preventivo necesario o, la compañía que está dando el servicio no es competente.
2.- Demandas
Las demandas, aun cuando pueden envolver a la empresa que ofrece el servicio de mantenimiento relacionan directamente al dueño del elevador; sea empresa o individuo. Al hablar de demandas se habla (además de la falta de mantenimiento) de la “negligencia del propietario" en mantener el equipo operando adecuadamente.
Si la empresa de mantenimiento puede demostrar que ha cumplido con lo estipulado en el contrato y que ha hecho las recomendaciones y sugerencias debidas de cambio y reemplazo de partes, sin repuesta del dueño, es seguro que la responsabilidad final recaerá en este último.
Para evitar estas situaciones consulta con una empresa acreditada en mantenimiento de elevadores y pídeles una evaluación del estado actual de tu equipo.
Muchas veces podemos iniciar un plan de trabajo hacia un mantenimiento preventivo con una inversión inicial mínima que prevé tener que llegar a alguno de los casos mencionados.
Crear un presupuesto para reemplazo de partes de emergencias junto con un Programa Preventivo de Mantenimiento es la clave del funcionamiento correcto de tu elevador!
Para más información sobre cómo evitar las situaciones que presenta este tema visita nuestra página http://www.puertoricosuppliers.com/delta/index.cfm !!
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